Begin Again

 Son las once de la noche 
en esta mitad del mundo.

Tú, 
a ti no te imaginé llegar.

Llegaste de la nada,
no te busqué.

Llegaste y con tu sonrisa
iluminaste mi apartamento.
Un apartamento apagado, 
con los cuartos cerrados, 
con libros llenos de polvo, 
con las luces sin bombillos,
un apartamento que había sido arrendado
pero la persona se fue sin más.

Y tú, 
con tu música, 
tus películas, 
tu llamita, 
tu cabello despeinado,
tus pecas, 
llegaste y comenzaste a tocar una puerta 
que estaba cerrada.

Me llevaste a la azotea a ver fuegos artificiales,
me llevaste a un espejo
me hiciste abrir los ojos...
y luego te fuiste
como si tu misión ya estuviera realizada.

No sé si fuiste tú 
o tu compañía
pero gracias
por existir.

Tengo tu nombre escrito en mi mano
por si un día decides encontrarnos.

Por ahora solo seguiré poniéndole luces a este apartamento.

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